Analisis por Mtro Belfort Loyola con base en Duhem, Mónica, (2020). La importancia de definir un concepto de calidad de la democracia, Espejel, Alberto (2023). El control político en el interior de los partidos políticos en México en el siglo XXI, a partir de sus estatutos e Informe Latinobarómetro (2023): La recesión democrática de América Latina
Y como todos sabemos este pasado domingo diez de septiembre del presente año, comenzó oficialmente el proceso electoral local en Tamaulipas para renovar 43 ayuntamientos y el Congreso local en nuestro estado. ¡Es un momento emocionante para la democracia!.
El Instituto Electoral de Tamaulipas (Ietam) ha aprobado el calendario para el registro de candidatos, tanto por partido político, coalición o de manera independiente. También se han establecido los períodos de precampaña y campaña, así como los montos de financiamiento público y de simpatizantes. Además, se han fijado las fechas para la distribución de diputados por representación proporcional y regidurías.
Asi que pronto las campañas para diputados locales y presidentes municipales comenzarán el 15 de abril del 2024 y concluiran el 29 de mayo del mismo año. Será un medio año lleno de propuestas, debates y decisiones importantes para nuestro futuro. Es momento de informarnos, analizar las opciones y participar activamente en este proceso electoral. Nuestra voz cuenta y juntos podemos hacer la diferencia.
Pero antes de todo lo anterior, como diría mi hija de apenas once años, «Comencemos desde el principio….» hablemos primero en términos de democracia («demos» – pueblo; «kratos» – poder), comunidad («polis»), la confianza y los hechos, ¿Que tanta relación existe entre todos estos conceptos?, ¿Cuál es la tendencia de la democracia en América Latina?.
La falta de comunidad y sociedad civil organizada en América Latina ha llevado a una crisis en la democracia. La confianza entre las personas se ha erosionado y la gente se siente aislada en una sociedad desconfiada. Esto ha llevado a una falta de inclusión y a un individualismo que aleja a las personas unas de otras.
Y es que la democracia se basa en la interacción y confianza en la comunidad. En la polis, las personas se conocen y confían entre sí. Esto permite que se tomen decisiones colectivas y se ejerza el poder de manera justa. Sin embargo, en la sociedad moderna, la comunidad se ha debilitado y la confianza se ha perdido. Las personas ya no se conocen entre sí y se sienten aisladas.
Este debilitamiento de la comunidad ha llevado a una falta de inclusión en América Latina. Muchas personas se sienten excluidas de la sociedad y no tienen un sentido de pertenencia. Esto ha llevado a una crisis en la democracia, ya que la participación y la confianza en el sistema se han visto afectadas.
Es importante destacar que esto no significa que la democracia haya fracasado en América Latina. Más bien, es una fase que se está atravesando y que puede superarse. Es necesario fortalecer la sociedad civil y fomentar la creación de comunidades fuertes. Esto se puede lograr a través de la participación ciudadana, la promoción de la confianza y la inclusión de todos los sectores de la sociedad.
Un ejemplo de cómo se puede fortalecer la comunidad y la sociedad civil es a través de la participación política. Cuando las personas se involucran en la política y toman decisiones colectivas, se fortalece la confianza y se fomenta un sentido de comunidad. Además, la participación política permite que las voces de todos sean escuchadas y que se tomen decisiones que beneficien a toda la sociedad.
Y es que en la política se presentan falsas dicotomías entre la libertad sin impedimentos y la libertad sin dominación. Sin embargo, el problema real radica en que esta polarización es solo una excusa para luchar por el poder sin que sea tan evidente. Los personalismos deshacen la trama de los partidos y aumentan la soledad en la sociedad.
En esta lucha por el poder, la libertad sin impedimento se basa en el dominio del dinero, mientras que la libertad sin dominación se basa en el control del poder. En una región donde la confianza interpersonal es escasa, las personas buscan protección en lugar de interacción. Esto dificulta la restricción de la dominación, ya que no se sabe hasta dónde llega. En última instancia, la libertad se convierte en un instrumento de dominación invocado por aquellos que tienen más poder o capital.
La falta de comprensión entre quienes defienden una u otra libertad ha llevado a la desafección con la política y el desprestigio de los partidos políticos. En resumen, la región carece de una dispersión del poder que permita la libertad sin dominación, ya que esta implicaría transparencia y rendición de cuentas sobre ese poder.
Al examinar en fuentes academicas de alta referencia como lo es el Infome de Latínbaromero 2023, del cual le extragio solo los datos para México en este articulo, observamos que el nivel de respaldo a la democracia en distintos países durante el periodo comprendido entre 2020 y 2023, se evidencian tanto incrementos como reducciones. En siete naciones, se registra un aumento en este indicador, mientras que en nueve países se observa una disminución. Por otro lado, en un país no se aprecian cambios en el nivel de respaldo entre los años 2020 y 2023.
En el contexto de la crisis económica causada por la pandemia, se están implementando diversas políticas económicas contracíclicas que tienen como objetivo brindar apoyo a los segmentos de la población más vulnerables. Esto, a su vez, contribuye a reducir el impacto de la crisis en el respaldo a la democracia.
Hasta el momento, podemos identificar dos razones que explican la disminución de la democracia. Por un lado, está el ciclo económico, que tiene un efecto limitado en el apoyo al sistema democrático, como se acaba de analizar.
Por otro lado, se encuentra la falta de bienes políticos, que se manifiesta en la baja calidad de las élites políticas, especialmente en la Presidencia de la República. Esto se refleja en prácticas como el personalismo, la corrupción, la permanencia en el poder más allá de los límites establecidos, y como veremos más adelante, el deterioro del desempeño de los gobiernos. Todas estas cuestiones resultan en un aumento de actitudes populistas y autoritarias, así como en la disminución de la imagen de los partidos políticos.
Es importante destacar que proporcionar bienes políticos resulta mucho más complejo que ofrecer bienes económicos, que pueden abordarse mediante el crecimiento económico y la implementación de transferencias directas a las personas más necesitadas en la sociedad. Como se ha observado, incluso un período de alto crecimiento económico entre 2002 y 2008 no tuvo ningún impacto positivo en la calidad de los bienes políticos.
En el caso de México
México experimenta una disminución en el respaldo a la democracia entre 2020 y 2023, pasando del 43% al 35%, lo que equivale a una reducción de ocho puntos porcentuales. Al mismo tiempo, se observa un incremento en la apatía hacia el tipo de régimen, aumentando en dos puntos porcentuales y alcanzando un 28%. En otras palabras, un poco más de un tercio de la población respalda la democracia (35%), aproximadamente otro tercio muestra indiferencia respecto al tipo de régimen (28%), y el restante tercio apoya una opción autoritaria (33%). Estos indicadores muestran un deterioro significativo de la democracia en México desde el año 2020. Además, esta situación podría propiciar un terreno propicio para el surgimiento de tendencias autoritarias y populistas en el país.
Los Partidos Políticos
Algo muy importante a destacar en el Infome Latínbarometro es que este año de 2023, se incorpora la variable Partidos Politicos, en la que se realizó por primera vez una encuesta a los ciudadanos de América Latina para evaluar el desempeño de los partidos políticos. La pregunta planteada fue: «¿Los partidos políticos funcionan bien?».
Desde el comienzo de la transición en América Latina, alrededor de un tercio de los presidentes electos han violado las normas democráticas. Los líderes carismáticos han adquirido una mayor relevancia, eclipsando la importancia de los partidos políticos. Esta fragilidad en la democracia ha llevado a la fragmentación del sistema de partidos y a una disminución significativa de su reputación y legitimidad.
Estos datos señalan que en todos los países de América Latina, los ciudadanos tienen una percepción mayoritariamente negativa en cuanto al funcionamiento de los partidos políticos. En ningún país de la región, los ciudadanos perciben mayoritariamente que los partidos políticos funcionan de manera «adecuada» o «bien».
Los factores que explican la disminución de la democracia en la región, caracterizada por la baja aceptación de la democracia, el aumento de la apatía hacia el tipo de régimen y una inclinación hacia el autoritarismo, pueden resumirse en tres dimensiones.
En primer lugar, las crisis económicas, aunque no son la causa principal de la caída de la democracia, ejercen una influencia negativa. Estas crisis conducen al incremento de las desigualdades, el aumento de la población en situación de pobreza y generan una creciente presión sobre las demandas de la población, que se vuelven inflexibles.
En segundo lugar, se evidencia una insuficiencia en la capacidad de la democracia para satisfacer las demandas de bienes políticos que la población requiere. Entre estos bienes políticos destacan la igualdad ante la ley, la justicia, la dignidad y una distribución equitativa de la riqueza. La corrupción, el personalismo y el abuso del poder con fines distintos al bien común contribuyen a socavar el progreso en la producción de estos bienes políticos.
En tercer lugar, se observa un marcado deterioro en el desempeño de los gobiernos, ya que carecen de la capacidad necesaria para responder a las demandas de políticas públicas. Este fenómeno ha resultado en cambios de gobierno en todas las elecciones presidenciales, con la excepción de una, desde el año 2018.
La confianza entre las personas se ha erosionado y la gente se siente aislada en una sociedad desconfiada
En conclusión, la falta de comunidad y sociedad civil organizada en América Latina ha llevado a una crisis en la democracia. La confianza entre las personas se ha erosionado y la gente se siente aislada en una sociedad desconfiada. Sin embargo, esto no significa que la democracia haya fracasado. Es una fase que se puede superar a través de la participación ciudadana y el fortalecimiento de la sociedad civil. Es necesario promover la confianza y la inclusión de todos los sectores de la sociedad para construir una democracia fuerte y justa.
Fuente:
Duhem, Mónica, (2020). La importancia de definir un concepto de calidad de la democracia. El Cotidiano, vol. 21, núm. 140, noviembre-diciembre, 2006, pp. 58-66. Universidad Autónoma Metropolitana Unidad Azcapotzalco Distrito Federal, México
Espejel, Alberto (2023). El control político en el interior de los partidos políticos en México en el siglo XXI, a partir de sus estatutos. Foro Internacional (FI), LXIII, 2023, núm. 2, cuad. 252, 251-284ISSN 0185-013X; e-ISSN 2448-6523DOI: 10.24201/fi.v63i2.2960
Informe Latinobarómetro 2023: La recesión democrática de América Latina