Netflix está en problemas, aplicó su política de no compartir contraseñas en Estados Unidos, y los usuarios comenzaron a cancelar sus cuentas.
Netflix está en problemas, aplicó su política de no compartir contraseñas en Estados Unidos, y los usuarios comenzaron a cancelar sus cuentas.
Desde el martes 30 de mayo, Netflix notificó a sus usuarios en Estados Unidos, que no podían compartir gratuitamente cuentas, con personas que vivieran en fuera de su casa.
La política de no compartir contraseñas de Netflix, también aplicó para otras regiones como América Latina, y países como Canadá, Nueva Zelanda, Portugal y España.
Netflix mandó correos electrónicos a sus clientes en Estados Unidos, para avisarles que podían agregar a un miembro adicional a sus hogares, por 8 dólares al mes (144 pesos, aproximadamente).
Periodistas de tecnología y usuarios se quejaron en Twitter sobre la nueva medida de Netflix.
Algunas de las principales quejas se enfocaron en que el contenido de Netflix no era tan atractivo, como para tener que pagar cuentas adicionales. Otros dijeron que esto podía haber funcionado, a un inicio, cuando Netflix era el único.
Otros usuarios, dijeron que, por mucho, Netflix era el servicio de streaming más caro, de la oferta existente.
Se prevé que haya una baja de usuarios, luego de la aplicación de esta política. La firma estadounidense Jefferies, encontró que el 62% de las personas que comparten contraseñas, dejarían de usar la plataforma de streaming, en lugar de pagar por la cuenta extra.
Netflix sugiere transferir el perfil de una persona para que el usuario conserve su historial de vistas y recomendaciones.
Las personas de un mismo hogar podrán seguir compartiendo la misma cuenta de Netflix y podrán utilizarla en varios dispositivos cuando viajen, explica la empresa en una entrada de su blog.
A mediados de mayo, Netflix comunicó que sus cuentas de menor costo, pero que muestra comerciales, ya tiene casi 5 millones de usuarios activos en todo el mundo. La edad media de esos espectadores es de 34 años, informó Jeremi Gorman, presidente de publicidad mundial de Netflix.
